de la lectura de la Toráh para Pésaj, día 6, Iesod en la festividad. Bamidbar-Num. 9,8: "Y dirá a ellos Moshéh: paraos, y atenderé qué ordenará Hashém a vosotros".
Si el colectivo enmienda y habilita sus herramientas de conciencia para recibir la palabra de Hashém, entonces el individuo singular (el líder, el juez, el rey, el profeta) alcanza la verdad rectamente para incidir de ella sobre todos.
"Y dirá a ellos Moshéh: paraos, y atenderé qué ordenará Hashém a vosotros" -nuestro verso completo, con valor 1492- y lo que Hashém ordenará recibirá forma nueva a mi decir (Shemot-Ex. 25,16) "el testimonio que daré a tí" ("ha'edút Ashér Etén Eléja"); y hallaremos gracia a ojos de Hashém (Bereshit-Gen. 28,20) "y me cuidará en el camino éste que yo camino" ("ushmaráni badérej hazéh Ashér Aní holéj"). Y reconoceremos y agradeceremos (Jer. 20,13) "a Hashém, pues salvó el alma del necesitado" ("Et Hashém ki hitsíl néfesh Evión"), al rey misericordioso (Ester 7,5) "que fue pleno su corazón en hacer así" ("Ashér melaO libó la'asót kén").
Si el colectivo enmienda y habilita sus herramientas de conciencia para recibir la palabra de Hashém, entonces el individuo singular (el líder, el juez, el rey, el profeta) alcanza la verdad rectamente para incidir de ella sobre todos.
"Y dirá a ellos Moshéh: paraos, y atenderé qué ordenará Hashém a vosotros" -nuestro verso completo, con valor 1492- y lo que Hashém ordenará recibirá forma nueva a mi decir (Shemot-Ex. 25,16) "el testimonio que daré a tí" ("ha'edút Ashér Etén Eléja"); y hallaremos gracia a ojos de Hashém (Bereshit-Gen. 28,20) "y me cuidará en el camino éste que yo camino" ("ushmaráni badérej hazéh Ashér Aní holéj"). Y reconoceremos y agradeceremos (Jer. 20,13) "a Hashém, pues salvó el alma del necesitado" ("Et Hashém ki hitsíl néfesh Evión"), al rey misericordioso (Ester 7,5) "que fue pleno su corazón en hacer así" ("Ashér melaO libó la'asót kén").
"Y dirá a ellos Moshéh" ("vaióMer Elehém moshéh" = 678) (Bereshit-Gen. 7,5) "de acuerdo a todo lo que le ordenó" ("kejól Ashér tsiváhu") Hashém. Y nos enseñó la regla, tal como ocurrió antes en el Mar Rojo -cuando nos ordenó callar y contemplar cómo Hashém es el que libra la batalla por nosotros-: "paraos, y atenderé qué ordenará Hashém a vosotros" ("'imdú veEshme'áh máh itsavéh Hashém lajém" = 814), y yo vendré (Bereshit-Gen. 20,5) "con la integridad de mi corazón y la limpieza de mis palmas (de mis manos)" ("betóm lebaví ubenikión kapái") y os revelaré: (Bereshit-Gen. 42,18) "ésto haced, y vivid" ("zóT 'asú vejaiú"), pues mediante la acción práctica de cada mitsváh-precepto os enmendaréis-habilitaréis para vidas de libertad, plenas de bendición y bien.
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